El domingo fuimos a una barbacoa que celebraban en la residencia de Fantoft. En realidad era una paella gigante para unas 30 personas.

Como curiosidad, antes de llegar a la BBQ-paella de los españoles, nos metimos en otro sitio: otra barbacoa, en la que te saludaban y te daban comida gratix, hasta que empezaron a hablar y nos dimos cuenta que era una asociación de cristianos… ¡así que salimos por patas! Supongo que iré al infierno, por leechear comida sin haber vendido mi alma.

Una vez en el lugar correcto, empiezan a hacer la paella. Yo me alisto en el regimiento de pirómanos, y nos vamos a por madera, porque no había suficiente carbón. Romper muebles viejos, prender fuego, quemar madera 🙂

Primer intento:

Segundo intento:

Tercer intento:

El tercer intento fue el definitivo. La Operación Paella se desarrolló con éxito:

Una vista general de la preparación de la paella.

(¿Desde donde hice esa foto? Se sorteará un forlayo derivado mediante filostros asíncronos entre los que acierten 😉 ¡Usad los comentarios!)

Despues de comer nos fuimos a un fiordo cercano. La temperatura del agua era genial, el próximo día me llevaré el bañador 🙂

Después de pasar la tarde en el fiordo, volvimos para casa: